miércoles, 10 de septiembre de 2014

De la Hermida al Samelar por las Verdianas y descenso por el Pico del Acero

Para el martes y miércoles pasados días 2 y 3, parecía que por fin Jose y yo podríamos realizar el proyecto que tenemos en mente desde hace ya mas de un año de subir a vivaquear en la cumbre de Torrecerredo. El tiempo lo daban bueno para los dos días, cuestión imprescindible para poder llevarlo a cabo, pero al final a Jose no se le arregló el encontrar canguro para los críos y una vez mas se chafó nuestro sueño. Tendrá que seguir en el cajón de los proyectos.
Pero el martes si que puedo salir, -prepara algo "fuerte"-, me dice Jose, así que toca buscar un buen recorrido y le propongo ascender al Samelar desde la Hermida, subiendo por la canal de Osina, Sierra de Bejes y desde las cabañas del Dobrillo ascender toda la crestería que lleva al pico de las Verdianas. La idea es, si las fuerzas nos responden, desde el Samelar descender la Paré Corvera por la Hendida, llegar al collado de la Llaguna, hacernos la arista de las Agudinas, admirar el Canchorral de Hormas que Jose aún no conoce, llegarnos hasta el Pico del Acero y desde su cumbre realizar un largo descenso para llegar al collado de Pebe, situado encima del barrio La Quintana de Bejes. Desde este collado se acomete el descenso hasta la Hermida por un sendero que en su parte inicial se encuentra muy deteriorado pues se utiliza muy poco, no así en su parte final, ya que es el que utilizan los que realizan la ferrata de la Hermida para volver al punto de salida.
Así que a las 7,45 nos pusimos en marcha acompañados por Jelu que se apunta a todas y no le hace ascos a ninguna marcha por fuerte que sea.

 Por el sendero que asciende la canal de Osina se sube casi todo el tiempo por una buena sombra. Aquí estamos en el único tramo que no es así, ya bastante por encima de la Hermida. Aprovecho para realizar esta bonita foto.

 Justo una hora nos lleva salvar los 450 mt. que hay que superar para llegar al collado de Osina, desde donde se tiene una vista muy completa del famoso camino de subida al pueblo de Tresviso y del Cueto de la Cerralosa por encima de el.
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Ahora nos toca ir ascendiendo muy suavemente la Sierra de Bejes, recorriendo un sendero que nos va mostrando rincones a cada cual mas bellos.


Hasta un poco antes de llegar al collado de Hoja ya bastante por encima del pueblo de Bejes, hemos ido por la sombra. De aquí hacia arriba nos toca soportar el tórrido calor que hace hoy, el día mas caluroso con diferencia de los que he yo he disfrutado este verano en la montaña.

Subiendo hacia las cabañas del Dobrillo, tenemos a nuestra espalda el pueblo de Tresviso.

Por encima del barrio de La Quintana de Bejes, vemos el collado de Pebe por donde descenderemos a la tarde hacia la Hermida.

La Sierra de Bejes y el collado de Hoja van quedando ya bastante abajo.

El collado de Pelea con la Ventosa y Peña Sagra asomando al fondo. Por encima de las praderías que se ven por debajo del collado y del Ajero descenderemos por la tarde.

Tras dejar atrás las cabañas del Dobrillo, abandonamos la pista  que asciende hacía Andara y afrontamos la larga crestería que nos llevará hasta el alto de las Verdianas.

Por la crestería, solo de tarde en tarde sopla una pequeña brisa. Sudamos a grifo abierto, y encima, grandes nubes de mosquitos nos rodean de vez en cuando y amenazan con devorarnos vivos, pero las estupendas vistas que vamos disfrutando lo compensa todo. El monte de la Llama y la majada de la Cerezal al fondo.

A medida que ganamos altura el viento nos refresca un poco mas. Aquí se ve toda la crestería que estamos ascendiendo con la costa entre san Vicente y Unquera al fondo.

Minutos antes de las 2 llegamos a los 2.022 mt. que tiene el Alto de las Verdianas.

Hoy es un día para extasiarse con las panorámicas.

En la cumbre, con el Samelar al fondo. Para llegar hasta el Samelar tenemos que perder cien metros para luego superar otros 300. Nos planteamos la posibilidad de cambiar el Samelar por el Canto la Concha, cumbre esta de 2.090 mt. que se encuentra al pie del Samelar, mas próxima a nosotros y que Jelu y Jose aún no han pisado nunca.
¿No veníamos al Samelar?, ¡pues al Samelar! dice alguno.

Y aquí estamos superando los últimos metros para llegar a su cumbre. Afortunadamente, por aquí sopla algo de aire que nos hace un poco mas grato el esfuerzo.

Ya en la arista final tenemos esta vista del Sagrado Corazón con el Coriscao al fondo. Por debajo de ellos el collado y el pico de la Jonfria.

Por la arista final.

Últimos pasos para Jelu con un magnífico fondo.

Llegando a la cumbre.

Fotos de cumbre. Los GPS marcan casi 2.400 mt. de desnivel acumulado en ascenso.

Magnífico día y magníficas vistas.
Jelu quiere estar antes de las 8 en Panes, por lo que nos informa que el desciende hacia Andara para coger la pista que baja hasta Bejes y después por la carretera hasta la Hermida.
Jose y yo seguiremos con lo programado. Descender la Paré Corvera por la Héndida para ir hacia el collado la Llaguna, las Agudinas y el Pico del Acero.

Yendo hacia la Héndida enseño a Jose la otra bajada que existe de la Paré Corvera, el Rendijón que discurre por esa encajonada canal, aunque parezca mentira.

Es un poco mas complicada que la Héndida, por lo que nosotros descendemos por esta última.

 Una vez descendida la Paré Corvera nos dirigimos hacia el collado de la Llaguna con la majada de Trulledes a nuestros pies.

El collado de la Llaguna (a la derecha de la foto se ve la laguna que existe en este collado y de la cual toma  nombre) y Las Agudinas con su bonita arista.
Llegados a este punto nos toca hacer una parada para realizar una valoración de nuestra situación. Debido al fuerte calor estamos a punto de quedarnos sin agua. Nos queda aún mucho recorrido y como el descenso lo queremos realizar sin pasar por Bejes, por la zona no conocemos la existencia de ninguna fuente, aunque a mi me suena haber visto en el mapa de Adrados que marcaba una por la zona de las minas de la Aurora que se encuentran unos metros por debajo del collado la Llaguna.
¿Que hacemos?. Sin agua no podemos ir hasta el pico del Acero y si por la zona de descenso no encontramos agua, no nos quedará mas remedio que pasar por Bejes.
Al final decidimos hacer la crestería de la Agudinas para que Jose vea el Canchorral de Hormas que aún no conoce, y después descender hacia la zona de las minas de la Aurora a ver si suena la flauta y encontramos agua.

Aquí estamos en plena crestería, que resulto muy entretenida. Ya vemos el pico del Acero por debajo de la Ventosa que se ve al fondo.

Disfrutando a tope.

Un poco por debajo del pedrero que se ve a la derecha de la foto, debajo de la Paré Corvera, encontramos el manantial que nos salvó la tarde.

Terminada la crestería descendemos unos pocos metros y nos situamos al borde de la pared donde se forma el famoso Canchorral de Hormas, un auténtico glaciar de rocas en lento movimiento que cae hacia el pueblo de Colio. Este fenómeno geológico es único en los Picos de Europa.
Una vez contemplada esta maravilla de la naturaleza nos volvemos a plantear nuestra situación, y a Jose se le ocurre mirar en su GPS por ver si en el mapa que tiene metido en el mismo, viene marcada la fuente.
Y efectivamente, casi a la misma altura de la que nos encontramos y a la otra parte de la crestería que acabamos de recorrer, marca una fuente. Recorremos unos 500 m. y enseguida damos con un abundante y fresco manantial que mana entre unas rocas y en donde saciamos nuestra sed con abundancia y reponemos nuestras botellas.
Sentimos un gran alivio, ahora podemos disfrutar de la hermosa tarde que tenemos y completar el recorrido que teníamos previsto, así que nos dirigimos hacia el collado que se encuentra al pie del pico del Acero y en la orilla del Canchorral de Hormas para desde el, afrontar los 70 m. que quedan para llegar ala cumbre de este pico de 1.675 m. de altitud.

El pico del Acero, el collado por debajo de el, y el Canchorral de Hormas a su derecha.

Como se puede ver, estamos disfrutando de una tarde preciosa.

Y que decir del pueblo de Colio y su entorno.

Llegando al pico del Acero con el Canchorral de Hormas al fondo, la crestería de las Agudinas por encima de el y por encima de esta, el Alto de las Verdianas.

De la cumbre del pico del Acero iniciamos un largo y vertiginoso descenso hacia la Hermida. Tras superar el barranco que se ve en la sombra, recorremos las praderías que se ven al fondo por su margen derecha hasta traspasar el pequeño collado que se ve al fondo en sombra.

Dejamos a nuestra izquierda y sin descender hasta el, el pueblo de Bejes.

Desde el collado, una mirada hacia atrás para ver nuestro recorrido.

Y mirando hacia adelante ya vemos cerca el collado de Pebe, desde donde iniciamos el descenso por la canal del mismo nombre hacia la Hermida, a donde llegamos a las nueve menos cuarto.
Han sido 13 horas de actividad con 27 km. recorridos y 2.700 mt. de desnivel acumulado.
Ante lo vivido hoy, solo puedo deciros una cosa ¡Buscad la belleza, es la única protesta que merece la pena en este asqueroso mundo!
¡¡Hasta la próxima!! ¡y no os olvidéis de ver el vídeo! .........si os apetece.

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