El pasado sábado 6 de Marzo nos acercamos hasta Fuente Dé con la intención de coger el primer teleférico y llegar lo antes posible a la estación superior del Cable. Si las condiciones de la nieve nos lo permitían, nuestra intención era llegar hasta Torre Blanca e intentar pisar su cumbre. Pese a llegar casi tres cuartos de hora antes de la primera subida del teleférico, justo nos vino para estar los primeros en la cola y poder subir en el primer viaje.
Mucha concurrencia en la cola para subir a disfrutar de la nieve. Los que cargaban con esquís, aventajaban a los que cargábamos con raquetas.
La zona de el Cables nos recibe con una cerrada niebla, una temperatura muy fría y una nieve con la dureza ideal para caminar sin hundirse ni un milímetro. Una parada nada mas comenzar para hacernos la foto de salida.
Algunos se paran para ponerse los crampones, otros continuamos y enseguida vemos que la niebla se va disipando dejando espacio a un sol radiante.
viendo que la nieve seguía en muy buenas condiciones para caminar sin raquetas, unos metros mas arriba de la Vueltona decidimos dejarlas detrás de una roca para recogerlas al regreso por la tarde.
Vemos nuestro objetivo de hoy y desde aquí parece que reúne las condiciones ideales para llegar a su cima.
Vamos ascendiendo hacia Cabaña Verónica disfrutando como pocas veces con una nieve ideal y un cielo azul totalmente despejado, y para embellecerlo aún más, con un precioso mar de nubes cubriendo toda la Liébana.
Al fondo vemos la cordillera con el Curavacas y Peña Prieta.
Poco a poco y disfrutando nos vamos acercando a Cabaña Verónica.
Nos encontramos con Mayte que está con otro grupo y que tienen el mismo objetivo que nosotros.
La subida y el día están muy fotogénicos.
Una parada en el refugio, que solo tiene acceso a la zona de la entrada. Vemos que por la hora y por el estado de la nieve, podremos llegar bien a Torre Blanca, con tiempo suficiente para no perder el último teleférico.
Magníficas las vistas que nos ofrece una vez más la montaña invernal.
Tras unos minutos de descanso, continuamos hacia nuestro objetivo que se asoma por encima de las lomas que hay arriba del refugio.
Vemos que por la Canalona progresan varios montañeros en busca de alguna cima de la zona.
Nosotros ya vemos todo el recorrido que nos queda para llegar a nuestro objetivo.
Nos disponemos a atravesar los Hoyo Sengros donde sufrimos los calores que los rayos del sol nos proporcionan al reflejarse en la nieve. Aunque la temperatura no es muy alta, la sensación en algunos tramos es como que estamos en un horno.
Jose que va por mas abajo que el resto, nos fotografía con el Tesorero por encima de nuestras cabezas.
Carlos que va por delante, con el Tiro Llago al fondo.
Llegamos a la parte final y mas pendiente, en donde nos juntamos con mas grupos que están intentando llegar a la cima.
Con la huella ya hecha y la nieve en muy buenas condiciones, es un disfrute el sentir que ya tenemos la cumbre al alcance de nuestra mano.
Ya solo queda Juan Carlos por llegar (Justo ha decidido quedarse mas abajo y esperarnos). Le fotografío con ese espectacular fondo.
La vista hacía el sur con la Torre Salinas y la Torre del Hoyo de Liordes en primer término.
Nos hacemos la foto de cumbre con nuestra amiga Mayte que hoy está con otro grupo.
Otro numeroso grupo esta accediendo a la cumbre de la Torre del Llambrión. Casi todos son viejos conocidos de la montaña con los que algunos de nosotros hemos compartido aventuras en mas de una ocasión,
Comemos en la cumbre disfrutando de las espectaculares vistas, y después iniciamos el descenso que no ofrece mas dificultad que un mínimo de concentración en los tramos mas verticales.
El amigo Justo en su particular atalaya donde también ha comido y disfrutado.
Una foto con la montaña que hoy nos ha permitido pisar y disfrutar en su cumbre.
Volvemos a pasar por Cabaña Verónica y con el objetivo "pesco" a dos que descienden del Tesorero. Por su cara sur se ven a dos que intentan llegar arriba. Parece que esta montaña también estaba hoy acogedora.
Otros que también desciende de esa cumbre.
Tras un rato de esparcimiento en el refugio, descendemos hacia el Cable a donde llegamos con tiempo mas que suficiente antes de su último viaje. Una vez mas hemos sido regalados con un magnífico día de montaña invernal que ha colmado todas nuestras expectativas, haciendo cumbre en una de las emblemáticas cimas de Picos. ¿Que mas se puede pedir? pues que se repita pronto.
Como siempre, el vídeo de la marcha por si queréis completar la visión de lo que nos dio de sí el día.
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