Norma que debiera ser de obligado cumplimiento

Norma que debiera ser de obligado cumplimiento para todos
Para facilitar la organización de vehículos y saber a quienes hay que esperar en Mompía o en cualquier otro lugar de reunión de salida, se ruega muy encarecidamente enviar un mensaje bien al móvil, o bien al correo electrónico de Alberto o quien dirija la salida, indicando quiénes van a ir a la marcha, lo más tarde el viernes al mediodía, si es posible.

jueves, 9 de junio de 2016

Un paseo por la costa santanderina

Como todos los años llegadas estas fechas, el amigo Dani nos convoca para realizar la bonita marcha llamada "de la costa", y una vez mas, la respuesta a esta llamada, se puede considerar de total éxito.
Fue el sábado 28 de Mayo cuando la realizamos en esta ocasión, con un muy buen tiempo por la mañana y algo de lluvia por la tarde, como viene siendo habitual en todos los sábado durante esta primavera.
Esta ruta de la costa se realiza desde la rotonda de entrada al Chiqui, hasta el pueblo de Liencres, pasando primero por el aparcamiento que hay al comienzo de la playa de Liencres y por debajo del pinar que existe en esta zona.
Ruta relativamente cómoda, con no mucho desnivel acumulado, pero hasta la parada de Liencres donde se coge el autobús para la vuelta, son unos 28 km. que no esta nada mal.
El recorrido transcurre por rincones de gran belleza, aunque bastante "castigados" por la mano del hombre, con demasiados ejemplos del poco respeto que los seres humanos demostramos hacia la naturaleza.

En la foto de salida estamos 23 mas Javichu que fue el fotógrafo, aunque creo recordar que se comento que eramos 25 o 26, una buena mezcolanza del 2000 y Pico, Gominolas y ex-compañeros y amigos de Dani.

Pasadas las 8,30 nos pusimos en marcha.

Llegando a la punta de Cabo Menor.

 El personal bien agrupado y en perfecta hilera. Poco duraría esta armonía.

Me adelanto al grupo para captarle desde la punta de Cabo Mayor. Como se ve, el pelotón ya esta totalmente fragmentado.


Pocas ciudades habrá en España que puedan presumir de tanta belleza.

El grupo totalmente dividido llegando a Cabo Mayor.
¡Aquí falta mucha gente!


El jefe de la expedición pide una foto de grupo en este inmejorable mirador.

De los 26 iniciales, estos son los que se han podido reunir para la foto.
¡Se hecha en falta una buena voz de mando!

Continuamos nuestro caminar yendo hacia el Faro.

Tras un reagrupamiento en el bar del Faro, descendemos hasta casi el nivel del mar para después de superar una corta pero empinada cuesta, llegar al derruido Puente del Diablo.
¡Tierra a la vista! parece decir Justo.

Los expedicionarios en pleno esfuerzo.

A nuestra espalda van quedando atrás el Faro y la punta de Cabo Mayor.

Al frente, hacia el oeste, el abrupto acantilado en la zona del Panteón del Inglés hacia donde nos dirigimos.

El amigo Justyn quitando obstáculos al camino.


Pasamos por el derruido Puente del Diablo que, entre que ya no es puente ni nada y las horrorosas pasarelas de madera que algún "iluminado" proyectó colocar en tan bonito lugar, ya no merece la pena ni fotografiarlo.
Tras dejar atrás tan penoso lugar, llegamos al paraje donde hasta hace poco tiempo se ubicaba el campo de tiro, y donde se encuentra el en su día peligroso paso de unos tres metros de longitud donde en el año 1992 mi amigo Fernando Pereda, tuvo el fatal accidente que le costo la vida cuando pasaba por este lugar en bicicleta, después de lo cual, se procedió a protegerlo con una barandilla.

Otra vista del Panteón del Inglés.

El amigo Lolo que es un gran conocedor de toda esta costa, nos va diciendo denominaciones de distintos parajes, pero solo le escuchan cinco alumnos, el resto va a toda prisa y ya nos sacan mucha distancia. Por desgracia, mi memoria no retuvo ninguno y no puedo trasmitíroslos.

 Esta singular formación rocosa es uno de ellos.

También nos paramos ante uno de los muchos mausoleos, cruces y placas que abundan por la zona en recuerdo de los muchos pescadores que fueron llevados por la mar.

No, el amigo Justyn no se acaba de escapar de ningún manicomio, solo es que lleva la visera un poco a la virulé.

En una marcha tan larga como esta, da tiempo hasta para intentar arreglar este país y casi casi, hasta el mundo entero. En esas estamos Begoña y yo, aunque la cosa no está para reírse ni mucho menos.

En la Maruca se hace otro reagrupamiento, aunque no sirve de mucho, pues a los diez minutos vuelve la desbandada.

Pasando por debajo del cementerio de Ciriego donde se ubicaba el antiguo vertedero de basuras, nos encontramos con un coqueto y de momento, bien cuidado parque con sus tumbonas de madera y todo.

En este tramos el sendero va muy pegado al acantilado. ¡Cuidadin, cuidadin!

Otra mirada hacia atrás para ver lo recorrido.

Y hacia adelante vemos ya próxima la isla de la Virgen del Mar.

Donde aprovechamos para tomar una cañita y hacer otro reagrupamiento.

Continuamos camino y llagamos a este bonito pasaje entre los acantilados, con la playa de San Juan de la Canal al fondo.


Un tramo muy fotogénico.


Llegamos a San Juan de la Canal y el grupo se divide. Unos quieren comer aquí y otros mas adelante. Como nadie quiere ceder, unos aquí y otros en donde cuadre.

 Tras saciar nuestro apetito seguimos camino, que aún nos queda mucho. Llegamos a la altura de la bonita isla del Castro, próxima a la playa de Covachos.

Espectacular este tramo llegando a la playa de Covachos.

 La isla desde otra perspectiva.

Curioso agujero en la roca. Una ventana al mar.

Otra curiosa alineación rocosa producto del machacón trabajo de las olas.

El personal quiere posar con tan singular fondo.


Estas formaciones rocosas en precario equilibrio se denominan Urros.


Pasando por encima de la playa de Cerrías.

¿Que, pican o no pican?

Este vértice geodésico marca el punto mas alto de la zona, Pedruquíos, 58 met. sobre el nivel del mar.
La cumbre mas baja realizada por el grupo.
Llegados a este punto, y animados por las gotas que estaban cayendo, parte de los expedicionarios tomaron las de Villadiego y se dirigieron hacia el pueblo de Liencres, algunos al lugar donde residen,
y otros a coger el autobús para regresar hasta Santander. El resto continuamos hacia la playa de Liencres donde alguno había dejado su coche por la mañana. Al hombre le ocuparon todas las plazas, y el coche al completo, inicio el regreso hacía Santander.

De los 25 o 26 que comenzamos esta mañana, atravesando el pinar para llegar hasta la carretera que nos llevará hasta el pueblo de Liencres, solo quedamos 5, y de estos cinco, solo tres disfrutamos de unas refrescantes cervezas sentados en la terraza de un bar. Tras lo cual, cogemos el autobús que nos lleva de regreso hasta Santander.
Y esto dio de si la marcha de la costa de este año.
El año que viene, mas.......y esperemos que mejor, por lo menos, que podamos ir un poco mas "en grupo", si es posible. Este año el personal creo que ha sido un poco anárquico a la hora de realizar el recorrido.
Por ultimo, como siempre, un vídeo de lo que dio de si la cosa,
¡¡SALUDOS MUY CORDIALES!!