Norma que debiera ser de obligado cumplimiento

Norma que debiera ser de obligado cumplimiento para todos
Para facilitar la organización de vehículos y saber a quienes hay que esperar en Mompía o en cualquier otro lugar de reunión de salida, se ruega muy encarecidamente enviar un mensaje bien al móvil, o bien al correo electrónico de Alberto o quien dirija la salida, indicando quiénes van a ir a la marcha, lo más tarde el viernes al mediodía, si es posible.

domingo, 19 de mayo de 2019

Un paseo por la Vega de Liordes

El pasado sábado día 4 de Mayo nos presentamos en Fuente Dé los nueve que se ven en la foto, con algunas caras nuevas y otras que hacia tiempo que no se las veía. Por presentaros a los nuevos, diré que fueron dos los que nos acompañaron por primera vez, Jesús Camazón, procedente del Suances y Paco, un vecino de José Carballo y de Victor del pueblo de Redo. En un principio la propuesta de marcha consistía en ascender al Pico Dos mil y Pico, pero Carballo y Paco habían manifestado su intención de ascender por la canal de Pedabejo para llegar hasta la Vega de Liordes y descender por los Tornos del mismo nombre, recorrido mas liviano que el original, y como alguno teníamos problema de horario, el grupo se dividió en dos, Jelu, José Luis y Juan Carlos se fueron hacia el Dos mil y Pico por la canal de la Celá, y el resto cogimos la pista que asciende hacia la canal de Pedabejo para llegarnos hasta la Vega de Liordes.
   
El grupo antes de separarse.

La mañana fresquita con un cielo azul. 

Cascada que cae de la zona del Alto de la Triguera.


Vamos ganando altura por la larga pista.

Dejamos atrás una bonita vega y afrontamos una empinada cuesta que nos deposita de nuevo en la pista principal.

Al inicio de la canal de Pedabejo hacemos una parada para tomarnos las 11, tras lo cual iniciamos la ascensión de la canal.


El equipo de Redo se fotografían juntos. 

Enseguida superamos la canal salvando algunos de los neveros que aún existen en ella.

Al final de la misma se nos aparece con toda majestuosidad la cara este de Torre Salinas. Nos vienen los recuerdos de cuando la ascendimos algunos de los que hoy estamos aquí.  

Llegamos al alto de la Canal, a 2.035 m., punto mas alto en el recorrido de hoy, con unas magníficas vistas de la zona del Llambrión y de la vega de Liordes, que vemos conserva mas nieve de lo que esperábamos. 

Nos vemos reflejados en las gafas de Jesús.

Con la cumbre del Dos mil y Pico al fondo, por donde andaban los otros tres expedicionarios.

Iniciamos el descenso hacia el casetón que hay al final de la vega con la nieve en buen estado para moverse sin crampones.

El letrero casi cubierrto por la nieve.

En el casetón. 

Otra foto del grupo junto al casetón.

Como aún es temprano, nos acercamos al collado de la Padierna donde se inicia la canal de la Sotin, para que Paco, que es la primera vez que visita estos lugares, vea la zona de Peña Santa y del Friero.

El Tiro Pedabejo al fondo. Nos quedamos con las ganas de ascender a su cumbre, pero sin los crampones, lo vemos peligroso.

Llegando al collado pisando un gran nevero con la Torre Salinas y la Torre del Hoyo de Liordes al fondo.


Llegamos a un pequeño alto junto al collado de la Padierna.

Chema lo celebra efusiva mente.

Otra foto del grupo.

Ahora nos dirigimos a la fuente que hay a la cabecera de la vega para comer allí.

Dando cuenta de los bocadillos.

Nos fotografiamos junto a un gran nevero que hay próximo a la fuente.

Después de disfrutar de la comida y de la compañía, iniciamos el vertiginoso descenso por los Tornos de Liordes.



Atravesando el único nevero que encontramos en la parte superior de los Tornos.

Fuente Dé novecientos metros por debajo nuestro, los cuales tenemos que descender.

El pueblo de Pido entre los montes que ya comienzan a verdear.

Peña Remoña ya va quedando bastante arriba.

Y Fuente Dé ya no tan abajo.

A las cuatro y media llegamos a los coches, con tiempo suficiente para regresar a casa los que teníamos prisa. Los que fueron al pico Dos mil y Pico descendieron por la Jenduda y llegaron casi dos horas mas tarde. Y esto es lo que nos dio de si el día. Fue una marcha liviana, pero como siempre, la Vega de Liordes no defrauda y nos lo pasamos muy bien tanto por el entorno como por la compañía.  Hasta otra...!