El 2000 y Pico en el techo de Picos: Torrecerredo 2.650 mt.

Un fuerte reto teníamos en el grupo 2000 y Pico para el pasado sábado día 12. Subir a la cumbre de Torrecerredo, cumbre que con sus 2.650 mt. es el punto mas alto de Picos y por supuesto, de toda la cordillera Cantábrica. Dos dificultades, bajo mi punto de vista, presenta la ascensión a esta emblemática montaña, a saber, el largo recorrido que hay que realizar para acercarse al pie de la misma, sobre todo si se deja el coche debajo de Sotres, y la ascensión de los últimos 150 mt. para llegar a la cumbre, que no son nada difíciles en si, pues se dispone de buenos agarres tanto para las manos como para los pies, pero presentan una fuerte inclinación  hacia la izquierda en sentido ascendente, y una fuerte caída, también hacia la izquierda, que no permite el mas mínimo fallo, con el añadido de la posible ciada de piedras que se puede producir si se junta demasiada gente en la pared.
Con ese gusanillo que se pone en el estómago cuando toca afrontar una gran ascensión, nos presentamos muy de madrugada donde finaliza la pista que sube hasta las majadas que existen por debajo del collado de Pandébano, dispuestos a afrontar esta ascensión correspondiente al mes de agosto en nuestro calendarios de marchas, marcha que por cierto, fue incluida en el calendario a propuesta del amigo Victor, y que por diversos motivos, al final no pudo acompañarnos, hecho que fue muy comentado durante la jornada, incluso surgió alguna propuesta de que en adelante, quien no acuda a su marcha propuesta, sea sancionado en la primera ocasión, con una invitación a cervezas de camionero.

Estos somos los diez que nos juntamos para tan exigente reto, de los cuales, solo cuatro ya conocíamos esta cumbre (para Jelu, por ejemplo, era su undécima ascensión) los otros seis, la afrontan por primera vez, con muchas dudas en la cabeza por parte de alguno. Caras nuevas en el día de hoy. Enrique y Guillermo nos acompañan por primera vez. Son ya montañeros con cierta experiencia. Adolfo Merino que se esta adentrando en el mundo de la montaña, es la segunda vez que lo hace con nosotros. Mucha juventud para inyectar sabia nueva a este grupo. Mención especial para Berto, asiduo de los Gominolas, que hoy se ha apuntado con nosotros para realizar por primera vez esta cumbre, y según el, para subir el nivel del grupo.

Enseguida llegamos al collado Pandébano y tenemos que realizar la primera parada para quitarnos ropa, que ya comienza a sobrar. Al fondo se nos muestra espléndido el Neverón de Urriello, con la Horcada Arenera a su derecha, Horcada que tendremos que atravesar mas tarde para acercarnos al pie del Torrecerredo.

Nada mas pasar el collado Pandébano, damos vista a la majada de la Tenerosa, y por encima de ella, se comienza a vislumbrar la silueta del Picu Urriellu.

Enfilamos el camino que lleva al Collado Vallejo y vamos dejando a nuestra derecha, muchos metros por debajo nuestro, el pueblo de Bulnes, y por encima de el, se nos muestra en su totalidad, la canal de Amuesa, por debajo del monte Acebuco.

Una vista general con Pandébano a la derecha, por encima de el, la Peña Main, y a la izquierda, el monte Acebuco y la canal de Amuesa.

Hoy el personal ha comenzado la marcha a un ritmo, diría yo, mas que fuerte. En cuanto me paro para realizar alguna foto y algún vídeo, me dejan muy atrás y no tengo manera de alcanzarlos. Aquí los saco ya en la lejanía, nada mas pasar el Collado Vallejo.

Sigo con la persecución, pero no consigo alcanzarlos. Un poco antes de llegar al refugio se realiza una parada para un pequeño avituallamiento, y ahí ya consigo juntarme de nuevo con ellos.

Llegamos al refugio y aprovechamos para abastecernos de agua, y algunos para tomarse un rico café.

Tras lo cual, enfilamos el camino que nos lleva hacia la Corona del Raso, paso clave para llegar a la Horcada Arenera.

Aquí ya estamos llegando a la vertical pared que nos corta el paso y que parece totalmente infranqueable. La clave esta en el paso denominado la Corona del Raso, que mucha gente confunde con la Brecha de los Cazadores, situado mas a la izquierda. El paso que nos deposita en la parte superior de la pared, se intuye en la parte superior derecha de la fotografía.

Hacia el subimos con una magnífica vista de Peña Castil y del Pico Urriello.

Tras superar la Corona del Raso, nos dirigimos hacia la Horcada Arenera, a donde llegamos en pocos minutos y desde la cual ya divisamos desafiante, la cumbre del Torrecerredo.

Realizamos otra corta parada para degustar los langostinos con los que nos ha sorprendido un día mas el amigo Chema.

Como hay gente en el grupo que visita por primera vez esta espectacular zona, en lugar de dirigirnos directamente hacia el Torrecerredo, damos un pequeño rodeo para visitar antes el Jou Negro, donde se conserva el último glaciar permanente existente en los Picos, reducido a la mínima expresión, y con serio peligro de desaparecer en los próximos años.

El inexpugnable para algunos, Pico de los Cabrones, a la derecha del helero y por encima de nuestras cabezas.

Dejamos atrás el Jou Negro y nos dirigimos hacia nuestro objetivo del día. Al fondo vemos el Tiro del Oso.

Llegamos al pie del Torre y tras ponernos el casco los que le hemos traído, comenzamos la ascensión con unas primeras trepadas fáciles y entretenidas.

Tras estas primeras trepadas, viene un tramo que se realiza andando hasta llegar al pie de los últimos 150 metros que son los mas verticales y los que requieren la máxima concentración. Dejamos las mochilas y con cierta tensión iniciamos la trepada.

En esta ocasión el grupo es disciplinado y nos movemos lo mas juntos posible para evitar que la posible caída de alguna piedra, adquiera una velocidad excesiva.

Vamos ascendiendo totalmente concentrados en donde ponemos las manos y los pies, y casi sin darnos cuenta, llegamos a la arista unos metros a la derecha de la cumbre.

Ya solo nos queda recorrerlos para llegar al punto culminante de la montaña.

Esta es la vista que se nos ofrece hacia el sur, donde vemos la Palanca, el Llambrión que conquistamos hace menos de un mes, Torreblanca, y al fondo en la cordillera, destaca el Espigüete, cumbre que también ha pisado el grupo en dos tandas, en los días siguientes a los de este relato.

Hoy mas que ningún día, no puede faltar la foto de cumbre......,aunque hay alguna ausencia notable.

La vista hacia el Cornión con la Peña Santa en el centro es espectacular. Para ser un día de agosto, hemos pillado un día sin nada de bruma.

Las cumbres principales del Occidental con mas detalle.

El pico de los Cabrones con su impresionante arista que le conecta con el Torrecerredo y que es objetivo de muchos escaladores. Por encima de el vemos también el Cabezo Llerosos.

Los chicos que nos sacaron la foto se encaraman en la parte norte de la cumbre, y aprovecho para hacer esta bonita foto. Desde la cumbre mas alta de Picos, con la sierra del Cuera y el mar Cantábrico de fondo.

El Tesorero y al fondo Curavacas y Peña Prieta.

Una panorámica con el vivac que hay en la cumbre y que nos esta esperando a Jose y a mi desde hace como cuatro años...¿caerá algún día?

Tras disfrutar un buen rato en la cumbre (como decía alguno, ¡aquí no se sube todos los días!) iniciamos el descenso, con mayor concentración si cabe, enfrentándonos al fuerte patio que tenemos a nuestros pies.

Poco a poco vamos perdiendo altura.

Un vistazo hacia arriba para ver lo que hemos bajado. Dos chicos que no son del grupo nos siguen en el descenso.

Últimos destrepes antes de llegar de nuevo a las mochilas.

Descendemos un poco mas antes de pararnos a comer, y ahora si, a disfrutar de la cumbre conquistada.

Ya en la parte baja en los últimos destrepes fáciles.

Iniciamos el regreso hacia la Horcada Arenera con el Neverón de Urriello en frente nuestro. Por cierto, esta cumbre puede ser un futuro reto para el grupo.

Llegando a la Horcada Arenera tenemos esta magnífica vista de la cumbre que acabamos de pisar.

Tras dejar atrás la Horcada Arenera, llegamos a la Corona del Raso, que nos ofrece unas espectaculares vista del Picu.

José Luis disfrutando del paso.

El refugio de Urriello muy concurrido. 

Tras degustar unas refrescantes cervezas en el refugio, a todo trapo hacia Pandébano.

Llegando al Collado Vallejo.

El refugio de la Tenerosa también muy concurrido, tanto de personal de dos, como de cuatro patas,

¡Que buenas nos saben hoy las cervezas en Arenas! Estamos muy contentos por la ascensión realizada en el día de hoy al techo de Picos y de la cordillera. Para algunos por primera vez, y aunque para otros ya es repetida, siempre es una ascensión que deja "huella".
Por último el vídeo que he preparado, con dedicatoria especial para Victor, que aunque no nos haya podido acompañar, es el culpable de que hoy hallamos disfrutado de este estupendo día de montaña.
¡Y que sepas que nos debes una ronda de cervezas!