Pico Deboru y Cueto Tejao por la canal de Brañiella

El pasado viernes día 22 Jose y yo nos llegamos hasta Sotres con la idea de ascender al Pico Deboru por un corredor que discurre por su cara norte y que le llaman el corredor Oblicuo, siempre y cuando las condiciones de la nieve y la meteorología nos lo permitiesen. Las previsiones del tiempo por el interior no eran muy halagüeñas pues teníamos borrasca del sur, y, efectivamente, cuando llegamos a Sotres, vimos que todas las montañas hacia el sur estaban cubiertas, y que las nubes solamente dejaban un poco al descubierto el Pico Deboru, nuestro objetivo, y la zona de Peña Castil que teníamos enfrente. Incluso dudamos de tirar hacia Peña Castil por el Collado de Pandébano y la Canal de las Moñas, pues Jose no conoce esa subida, pero al final nos decantamos por nuestro objetivo inicial y a las ocho de la mañana partimos del pueblo de Sotres para acceder a la canal de Brañiella.
 Aproximadamente, a la mitad de esta canal, parte a su derecha el corredor Oblicuo. Si las condiciones de la nieve nos lo permiten, ascenderemos por dicho corredor, y si finalmente desistimos de ascender por él, seguiremos por la canal e intentaremos llegar a la cumbre por su vía normal.

En este mapa de Adrados he marcado  con linea continua el recorrido que al final realizamos y con puntos, por donde transcurre el corredor Oblicuo.
Una aclaración sobre lo que ocurre con los nombres de las cumbres de esta zona del Cueto Tejao.
En el mapa de Adrados y en el del IGN, a la última cumbre de 2.129 metros del cordal que viene desde el Pico Valdominguero, la da el nombre de Cueto Tejao, y a la anterior, de 2.159 metros, la denomina Picas del Jou Sin Tierre. Sin embargo, en el foro de Picos he visto que muchos montañeros, cuando hacen actividad por esta zona, al que Adrados llama Cueto Tejao, lo llaman Pico Deboru, y lo que llama Picas del Jou Sin Tierre, lo llaman Cueto Tejao.
 Según ha aclarado uno de ellos en el foro, la confusión viene por lo siguiente. En la zona de Sotres, siempre se ha llamado al último de la crestería de 2.129 metros, Pico Deboru y al de 2.159, Cueto Tejao. Sin embargo, en la zona de Tresviso llaman Cueto Tejao al conjunto de ambas cimas, lo que ha transcendido a muchos montañeros y de ahí ha pasado a los mapas esta confusión.
 Yo he decidido utilizar la que parece ser la toponimia original, por lo tanto el corredor que en un principio pensábamos ascender, trascurre por la cara norte del Pico Deboru.

Ascendemos unos metros por una pista que parte de Sotres y cuando da una cerrada curva a nuestra izquierda, llegamos al collado la Varera, donde abandonamos la pista para tras descender unos metros por unos prados, acceder a la canal de Brañiella. Desde el collado tenemos esta vista de la canal y del corredor.
 La nieve que hace tres días cubría toda la zona con un buen espesor, se ha derretido mucho, sobre todo en la parte baja de la montaña, barrida por el fuerte viento del sur.

La misma con otra perspectiva y con la cumbre del Deboru visible.
 Aparte de las nubes que andan entrando y saliendo sobre la cumbre, un fortísimo viento del sur con rachas muy fuertes que en algunos momentos están a punto de tirarnos al suelo, hacen que dudemos mucho de poder llegar a la cumbre.

Cuando comenzamos a pisar la nieve por la ladera de acceso a la canal, nos la encontramos muy blanda. La cosa mejora un poco, pero sólo un poco, al haber mas grosor de nieve, cuando comenzamos a progresar por el fondo de la canal.
De vez en cuando las rachas de aire hacen que tengamos que aferrarnos a los bastones y con las piernas totalmente en tensión, evitar caer al suelo.
Al llegar al desvío para la entrada al corredor, deliberamos sobre que opción tomar. Por el estado de la nieve no vemos inconveniente, pues se hace muy bien huella, (demasiado bien diría yo). El problema es el viento, que si en la parte baja de la montaña nos zarandea de esta manera, a la salida del corredor, ya cerca de la cumbre, donde está la parte mas inclinada, nos puede echar a rodar montaña abajo. En estas condiciones no nos podemos arriesgar, y tampoco vamos a disfrutar como se merece este guapo corredor.
Decidimos dejarlo para otra ocasión en que tengamos unas mejores condiciones para disfrutarlo a gusto.

Seguiremos por la canal y veremos hasta donde nos dejan llegar las condiciones que tenemos.

Por la parte superior de la canal el viento no atosiga tanto y sólo nos centramos en abrir huella por esta nieve tan blanda.
Al fondo de esta foto se ven Peña Main y el Collado de Pandébano.

La parte final de la canal se pone muy inclinada y con una nieve que nos hace esforzarnos a tope para abrir huella, sobre todo a Jose, que es el que mas tiempo va en cabeza, ¡pero que conste que fue por su gusto!.
 Las raquetas, como pensábamos meternos en el corredor, las hemos dejado en el coche.

Saliendo de la canal de Brañiella, el viento nos vuelve a sacudir con mas ímpetu si cabe.

Como se ve, o mejor dicho, se oye en los vídeos, el viento apenas deja percibir lo que explicamos en ellos. Pero es algo que cuando sopla tan fuerte, es imposible de evitar, a no ser que se corrija con un programa de edición de vídeos, cosa que a parte de llevar mucho tiempo, desvirtuaría la percepción de las condiciones adversas en las que nos movíamos.

Al salir de la canal se nos muestran el Pico Deboru a la derecha y el Cueto Tejao a la izquierda. Luchando contra las ráfagas de viento, encaminamos nuestros pasos hacia el primero.

Peña Castil con el collado de Camburero a sus pies y con el Neverón de Urriello y Los Albos al fondo.

Un poco a la izquierda de la cumbre del Deboru, encontramos unas huellas que ascienden hacia la arista entre el Deboru y el Cueto Tejao. Las aprovechamos para no hundirnos tanto. Bastante tenemos con luchar para mantenernos en pie. En este tramo las rachas son fortísimas. ¡Cuando salgamos a la arista, no sé si saldremos volando!

Jose me fotografía en el último tramo antes de la cumbre. 

La mala calidad de este vídeo es debido a las rachas de viento que no me dejaban mantener la máquina quieta.

Tuvimos la grandísima suerte de que al llegar a la arista y en el tramo de acceso a la cumbre, el viento aflojo bastante y dejó hacernos las fotos de cumbre sin tener que estar pendientes de no salir volando.

Aunque lo que ocurrió fue que al calmar el aire se puso a nevar, y al final no pudimos disfrutar de las excelentes vistas que tienen estas cumbres.

Unas fotucas rápidas y para abajo.

Pero claro, hoy estoy con Jose, y como le gustan las cumbres tanto o mas que a mi, rápidamente me propone el llegarnos hasta la del Cueto Tejao, que está aquí al lado.
-Te lo iba a proponer yo ahora mismo,- le contesto.

Y para allá nos fuimos.

Yo, llegando a la cumbre.

Otros dos minutos par las fotos de cumbre y para abajo.

Al descender la parte primera, las nubes se abren un poco y dejan entrar unos acogedores rayos de sol.
En unas rocas que encontramos nos paramos a comer un poco, que bien ganado lo tenemos hoy.
Pero cuando estamos a medio bocadillo se pone a nevar con bastante fuerza, así que lo tragamos a toda prisa, que esto se pone feo.

Hay un dicho que dice que en los días de Marzo-Abril se pueden dar las 4 estaciones en un solo día. Al poco de proseguir nuestro descenso, y cuando parecía que la cosa se ponía chunga, en pocos minutos las nubes comienzan a disiparse y el sol nos "abrasa" una vez metidos en la canal.

Lo cual pone aún mas "paposa" la nieve y el descenso se convierte en un auténtico calvario. Jose se lanza para abajo y se convierte en un puntito negro sobre la nieve.

Al salir del fondo de la canal y con un sol de justicia, se para a esperarme y nos juntamos para continuar el descenso ya fuera de la nieve. En la canal se ve perfectamente nuestra huella.

Otra bonita vista de Peña Castil.

Al fondo, debajo de las nubes, Tiro Navarro, en el centro Peña Castil, y a la derecha la Cabeza de las Moñas.

En la ladera de la canal de Brañiella cruzamos esta bonita cascada.

A las 5 de la tarde llegamos a Sotres, después de una pequeña "enriscada", intentando descubrir un acceso distinto desde el pueblo hacia Brañiella, y en el momento justo en que comenzó a llover con fuerza de nuevo, después del rato de sol que disfrutamos en la parte final del descenso.

Y por último este montaje que he preparado con los vídeos que Jose hizo de esta pequeña aventura vivida en el día de hoy.
Al final no hicimos el corredor, pero hicimos dos cumbres pese a las malas condiciones reinantes, y que, a mi por lo menos, me dejan tanto o mas satisfecho que en otras ocasiones en que el día está mas en calma.
¡Eloy! ¡Jose! ¡el corredor Oblicuo del Pico Deboru nos espera!